lunes, 30 de marzo de 2009

Peñotillo y Maliciosa desde La Barranca


La subida a la Maliciosa por el camino usual, desde la Bola del Mundo o desde el Valle de la Barranca remontando por el arroyo del Regajo del Pez y por El Piornal, es salvo mal tiempo o presencia de hielo camino trillado, paseo montañero prácticamente desprovisto de la rudeza y emoción que adivinas cuando contemplas desde la cumbre la otra subida por la cara sur. Había que intentar la cara sur.

Hicimos hace ya meses dos aproximaciones desde Vista Real (El Boalo), que nos llevaron hasta prácticamente la base del Peñotillo haciendo la subida por el Arroyo de Peña Jardinera. La primera parte de esa ruta es pesada porque hay que hacer una subida por una pista hormigonada con fuertes rampas hasta llegar a un pantano, a partir del cual se inicia un ascenso mucho mas interesante por una senda que transcurre prácticamente en paralelo a dicho arroyo. Después de superar mas de 800 metros de desnivel desistimos proseguir, un poco exhaustos, una vez porque pegaba el sol en exceso, otra porque el cuerpo no nos pedía mas y la subida claramente hubiera requerido la utilización de crampones en los neveros de la parte final. Pero fue quedando como una tentación invencible: que había que intentarlo, llegar por allí a la Maliciosa.

Así que en este sábado primaveral, mas bien fresquito y con amenaza de cambio de tiempo nos pusimos las pilas a ver hasta donde llegábamos. Éramos cuatro, dos chicas trepadoras y dos chicos porteadores. Cambiamos el punto de inicio que esta vez fue desde la Barranca (aparcamiento del Hotel, señalización sendero Tijerillas – La Maliciosa)

 La marcha se inicia bajando hasta cruzar el Río de Navacerrada por un puentecillo. A partir de este punto es una subida continuada que no dará descanso salvo en algunos tramos casi llanos de la Cuerda de Los Almorchones. También es permanentemente bellísima porque se mantienen las vistas sobre el Valle de La Barranca y cuando se llega a la cuerda se va divisando también los dos de los valles o cuencas que se generan en la Maliciosa: el del Arroyo de la Maliciosa y el del Arroyo de Peña Jardinera. Mientras se va progresando por la cuerda en dirección al Peñotillo. La vista de esta cumbre que es el fondo permanente durante toda la subida, aparte de los valles anteriores, hace que esta marcha sea incomparable. No se puede describir la belleza de este impresionante Peñotillo, auténtico monumento pétreo, mucho mas que la propia Maliciosa. Y es emocionante irse acercando a la base del mismo, hasta la misma base que la senda circunvala, y que es lugar mágico conde hay que descansar y parar a contemplar, casi meditar.

La subida hasta el Peñotillo es esforzada por las fuertes pendientes aunque no especialmente dura. Estaban las chicas espléndidas como el día y con energía desbordante con lo que se pusieron en cabeza y los chicos ya sabíamos a quien seguir. Cuando llegamos allí teníamos, como se dice, buenas sensaciones y nos parecía que merecía la pena seguir y explorar la zona. Hay en la base del peñotillo un refugio que es cueva natural con entrada tapiada en piedra que es casi un chalé de lujo, tiene poca altura pero hay espacio para tres o cuatro personas que quisieran dormir protegidos.

Rodeando por la derecha el Peñotillo pronto se accede a la zona superior de la cuenca del Arroyo de Peña Jardinera, desde donde arrancan las vías que ascienden hasta la Portilla del Peñotillo.

En este punto tuvimos el ánimo de iniciar la subida sin compromiso de rematarla. Se asciende entre canchales y terreno descompuesto con pendiente muy fuerte, que a veces obliga a buscar piedra para evitar deslizamiento. Cuando parecía que llegaba el desánimo empezamos a considerar que merecía la pena terminar de subir para evitar el descenso por el camino de subida cosa que parecía desaconsejable. A pesar del esfuerzo conviene disfrutar en esta subida los paisajes y sensación de vértigo de lo que dejas atrás. Cruzando algunos neveros arriba llegamos a la cuerda final y casi directamente al geodésico de la Maliciosa. Allí llegamos con las caras radiantes porque ninguno habíamos pensado que íbamos a subir y lo que nos salía eran ganas de abrazarnos y de felicitarnos mutuamente. Entre jóvenes montañeros que habían llegado por el camino fácil se veían caras de extrañeza porque no les cuadraba mucho que nosotros subiéramos por allí. Pero algunos nos pidieron consejo sobre como bajar por allí, no porque estuviera en su plan sino porque las nieblas estaban entrando por la Bola y el temporal anunciado amenazaba, y aquella les parecía una mas rápida vía de escape.

 Decidimos retrasar la comida porque, en efecto, el tiempo cambiaba rápidamente a peor. Las nubes cubrían las cimas de Guadarrama y jirones de nubes se proyectaban hacia el valle de la Barranca. El viento era fuerte de este lado, lo que disolvía la niebla pero era una amenaza de ventisca. Nos dirigimos rápidamente hacia el Collado del Piornal.

 El regreso lo hicimos tomando el camino del Regajo del Cancho Negro, que después se convierte en Regajo del Pez, hasta llegar ya iniciada la ventisca a la fuente de La Campanilla.

 Con riesgo de quedarnos helados paramos a comer, junto a la fuente y en mesa, como Dios manda. No podíamos volver con los huevos a casa. Quiero decir que llevábamos media docena de huevos que freímos con chorizo y acompañamos con vino y mas cosas que con el frio que hacía no daba tiempo contar. Y continuamos empujados por el viento y una nieve fina y granulosa que decoró nuestras espaldas y mochilas haciendo un bonito cuadro del final de la marcha.


Hay una cita que me gusta, y que os repito.

El Pico de la Maliciosa (2.227m), única cumbre que merece tal denominación, si acaso compartida con el Peñalara, en toda la Sierra de Guadarrama. En otros tiempos también se conoció a esta cumbre con el nombre de La Monja por su forma parecida a la toca de las religiosas, cuando esta nevada, la cara sur. Hasta hace muy poco, esta cumbre era de propiedad particular. Afortunadamente la Comunidad de Madrid se hizo con ella por 65 millones de pesetas. 

Hay mucha información de esta marcha. Nosotros seguimos aproximadamente la ruta que se define en: