lunes, 7 de septiembre de 2009

Ungüento curapiernas con árnica



Cada vez que hacemos una propuesta de marcha, incluso de paseo, mas y mas amigos cuentan que tal como tienen las rodillas u otras partes que mejor que no. No estoy yo mismo muy lejos de ese trance, y como los médicos solo saben recetar estériles radiografías y, en todo caso, mandarte a rehabilitación a los tres meses, estamos buscando soluciones en herbolarios y boticas. Esta vez, hemos oído acerca del Ungüento curapiernas con árnica

Es un buen ungüento al decir de nuestra amiga Silvia, quien une a su dilatada experiencia en males del cuerpo curables con las manos y con bálsamos, su intuición de curandera medio bruja. Asegura que este remedio que nos cuenta es bueno para curar las junturas de las piernas, sean de tobillo, rodilla o entrepiernas. Ahora estamos convencidos por pura afección, luego porque en aplicándola veremos sus buenos efectos, lo que os contaremos, fijo.

El ungüento se confecciona con una mezcla de hierba de árnica, arcilla y bálsamo Zyghin. El árnica en hojas, la arcilla normal o común (no roja ni verde), preferible arcilla de la marca Soria Natural que dicen que es superfina. Sobre el bálsamo ni idea

Hay productos comercializados que se presentan como un polvo, mezcla de arcilla y diversas plantas pulverizadas. Del árnica no se dice nada, pero de los que utilizan jengibre y alholvas se dice que es “analgésico, antiinflamatorio, antiséptico y cicatrizante en uso externo, ya que a las propiedades de la arcilla se le unen las de las plantas utilizadas. Es útil y da resultados sorprendentes en esguinces, tendinitis, dolores musculares y articulares, reumatismo articular agudo, procesos reumáticos, lumbago, ciática, dolores de muelas, de oído, afecciones de garganta, sinusitis, úlceras varicosas, heridas infectadas, etc. Puede aplicarse en forma de emplasto mezclado con miel o agua”.

Pero volviendo al nuestro con árnica, tenemos la ventaja de hacer nosotros mismos el ungüento, como sigue:

Para preparar ungüento para 2 o 3 días, hervir agua (un vaso de agua). Cuando hierva echar una cucharadita de árnica y apagar el fuego inmediatamente. Dejar reposar y enseguida colar. Enfriar un poco el agua.

Para preparar el ungüento de una dosis, echar en un tazón de cerámica un poco del agua de árnica, añadir arcilla de forma que quede bien espesa, como una cataplasma. En este punto añadir un trocito de bálsamo Zyghin y remover.

Este bálsamo no se come. Es para aplicar sobre la zona a curar. Por ejemplo: extender por la rodilla, tanto en la zona delantera como trasera. Mantener el ungüento hasta que se seque completamente la arcilla. Para quitarla, en la bañera con chorro de agua tibia. El tratamiento puede ser aplicación dos veces al día durante un mes, y reducir a una vez al día cuando se note mejoría.

Si empezamos ahora en octubre todos de marcha.